Chato, Monty y yo tres valientes ante el calor.
Estamos empezando el mes de septiembre y con el amigo Andrés (chato) el amigo Monty y yo hemos quedado en el puente de la barriada de la Noria, ya que es un punto intermedio entre los dos pueblos
y nos viene bien para hacer la ruta de Tierra Esperanza.
La hora acordada son las 8 que todavía empieza a despuntar el sol y con la previsión de que hoy bajan las temperaturas, según los meteorólogos, yo llego al puente y el Chato ya está allí
esperando, comentamos por donde ira la ruta mientras llega Monty, el cual llega pegando resoplidos y quejándose de la mochila, tampoco es para tanto, jijiji (solo lleva, dos napolitanas, dos
latas de piña, un bocadillo tamaño xl ,un plátano y dos litros de agua) por si vamos hasta la tética. Comenta Monty aunque que le comento que según la hora que lleguemos hasta los seis pies.
Nos ponemos en marcha por un lateral de la barriada buscando el cauce del rio Almanzora, empezamos a remontar el rio hasta la antigua fábrica de mármol la que trabajaba con la fuerza del agua,
tomando dirección hacia la rambla la mendula, que aunque dado la gran sequedad conserva algo de verdor entre los numerosos árboles. Tomamos una curva y la primera cuesta, la del dique, que hace
que se empiecen a testar el nivel de fuerzas de las piernas. Siguiendo por toda la rambla hasta su inicio que nos da vistas a el Canfornal en su zona mas alta, aquí seguimos dirección hacia
Purchena por el camino del barranco de Gevas, no sin antes arreglar la primera incidencia, me doy cuenta que la cala de mi zapatilla izquierda esta suelta y con equilibrio y experiencia logro
sacarla ( ya que al estar suelta, giraba y no se soltaba) como siempre llevamos llaves para casi cualquier situación, la aprieto y mientras Monty se come su primera lata de piña, para ir quitando
peso, decidimos seguir pero el chato al reanudar la marcha la rueda delantera le escarba en la graba y provoca que se baje de la bicicleta con ella puesta, como se suele decir, cada uno se baja
de la bici como quiere, el caso es que la caída fue casi parado con lo que se quedó solo en la caída por suerte.
Proseguimos hacia el barranco de Gevas, afrontando el gran
descenso hasta este, yo en cabeza y mis dos compañeros detrás, a más velocidad más riesgo y más si se te cruza una cabra montesa justo delante, tan justo que la vi casi rozar los cuernos del
manillar, como comentamos el chato y yo, pues él iba justo detrás de mí. Y monty que lleva la cámara en el casco sin grabarlo, te pierdes las mejores, jijiji.
Pasamos el barranco de Gevas y salimos a la carretera que viene de Purchena en dirección hacia el merendero de la Silveria, aquí el tramo de asfalto o lo que queda de él nos sirve para
reagruparnos y comentar el siguiente tramo a hacer, el de las minas, por donde vamos ahora es el camino de los Palmares y justo en la curva donde se encuentra la señalización de varios senderos
tomamos dirección hacia el camino de la Pava, dejando este por una estrecha verea que antes era el camino usado para subir y bajar delas minas de hierro y mercurio que había en la zona, ahora
solo quedan los restos de la extracción y el camino que nos vuelve a cruzar con el de los Palmares, aquí tenemos dos opciones, seguir por verea y zona técnica por la zona del cargadero o seguir
por semi asfalto, Monty empieza a decir que no va muy bien y decidimos tomar por el asfalto.
Menuda rampa hasta volver a dar un poco de resuello y mejorar el asfalto, me doy la vuelta y mis compañeros se van quedando un poco retrasados así que aflojo el ritmo que ya estamos en el cruce
del Alhamil por todos conocido y lugar de parada, aquí comemos algo y nos hacemos la foto con el letrero de Tierra Esperanza, ya se va notando el calor sofocante y casi la ausencia de aire, a
veces los meteorólogos se equivocan cuando se trata de Almería. Después de la parada proseguimos subiendo en dirección hacia el merendero que según dice el letrero son 700m pero vaya tramo,
llegamos hasta el cruce donde hay que bajar al merendero y se acaba el asfalto, seguimos hacia arriba pasando por la zona de la quebrada, zona donde hay unas vistas espectaculares de todo el
valle, pudiendo contemplar gran parte de los pueblos del mismo. Llegamos al cruce que hay a nuestra derecha y que tiene marcas de balizamiento de sendero, es el camino de Sufli a Tahal y es por
donde nosotros descenderemos en dirección hacia la solana del romeral dejando a un lado el camino de Sufli. Bajando por la solana vemos justo debajo el pueblo de Sierro, el cual en algunas
ocasiones pare que vamos pisando por encima de los tejados de las casas y casi es posible tocar su castillo, si no fuera por la tremenda caída que hay hasta el, la bajada la hacemos muy rápida ya
que Monty la va grabando con la cámara y en las bajadas se tira el tío a tumba abierta tanto que tiene que frenar un poco su ímpetu al hacerle un extraño la rueda delantera, querría tocar el
pueblo, jejejeje. Ya en el asfalto que viene del pueblo en dirección hacia la casa la Fuensanta, esperamos un poco ya que el chato se toma las bajadas con mucha tranquilidad desde que tuvo la
caída en la que se partió la clavícula, con lo que un poco de miedo se coge en estos casos y lo digo por experiencia propia, ya de nuevo reagrupados afrontamos el último tramo de asfalto hasta la
Fuensanta con tranquilidad ya que se empina bastante hasta terminar el asfalto y dar paso a la pista de tierra, el chato comenta, dios todo lo que hemos bajado, y así es desde 1095m que estábamos
en el cruce hasta los 800m que estamos todo ese desnivel lo tendremos que subir por este lado y mucho más hasta los seis pies.
Ya vamos por la zona de la sacristía y como si fuera una penitencia el sol nos pega sin medida, hasta el chato dice de darnos la vuelta pero lo convencemos de seguir parándonos en otra sombra y
comiendo algo más, otra lata de piña que se quita el Monty de la mochila, la cual comparte con nosotros.
Proseguimos, chato y Monty comentan que las fuerzas son pocas y vamos subiendo a un ritmo muy lento para por lo menos llegar a los seis pies, Monty se va por delante y yo voy esperando a el chato
que cuando uno va con pájara un poco de charla hace que no pienses tanto en el buitre que sobrevuela, hacemos varias paradas en la sombra hasta que al final coronamos en los seis pies, por fin.
Aquí con los botes de agua casi vacíos Monty nos ofrece bocadillo de salchichón y queso, pero lo que vamos buscando es agua fresca o cerveza que vendría mejor.
Recuperadas un poco las fuerzas empezamos la bajada hasta el Reul Alto donde en sus adentros hay una fuente que como un oasis nos rejuvenece con su agua fresca, aunque el chorro es muy pequeño su
frescor y su pilón siempre están llenos, dando lugar a que nos mojemos casi enteros, echándonos botes de agua por encima como se verá en el video de Monty.
Con los maillot chorreando salimos en dirección hacia Laroya y son ya casi las una de la tarde, en el descenso el tremendo calor hace que se sequen antes de llegar al pueblo, pero he aquí que no
se acaba el día, ya que Monty y yo vamos bajando rápido por el asfalto y en la última curva donde ya vemos el pueblo nos damos cuenta que el amigo chato no viene, el baja lento pero se ve más de
un kilómetro hacia atrás de recurvas y no se ve, lo llamo al móvil y no tiene cobertura, yo que todavía me quedan fuerzas subo a ver qué ha pasado, conforme voy subiendo me voy preocupando más ya
que piensas en lo peor, pero al volver una curva ya casi en los dos kilómetros de subida me lo encuentro dando aire a la rueda, con lo cual un suspiro de alivio, “que te ha pasado, pues que se ha
partido la válvula y suerte que he podido controlar la bici ya que se ha vaciado entera”, me contesta el chato y en eso el coche de la cruz roja que sube hacia arriba, con lo cual imaginaros lo
que peso Monty que estaba abajo al ver pasar el coche hacia arriba.
Menos mas que no tardamos en aparecer nosotros hacia abajo, y ya los tres cruzamos el pueblo por la parte trasera en dirección hacia Macael. Que tremendo calor hasta en la bajada, el aire viene
como el aire de las chimeneas “ardiendo” pero como no hay dos sin tres, de repente noto que la rueda delantera me hace un extraño y es que está perdiendo aire, seguro que un pinchazo pequeño pero
yo no me paro con la calor que hace ya casi las dos de la tarde y sin sombra, este llega a casa, así que con paciencia y sin correr riesgos terminamos de bajar hasta la fuente la rana en Macael
donde me despido de mis compañeros, deseando vernos en la próxima y aligerando el ritmo para llegar a casa antes de que se vacié entera la rueda.
Al final llego, y yo que el día ha sido de órdago de calor, espero que los compañeros hayan llegado bien a sus casas e hidratado bien, la ruta es dura pero la calor la ha hecho más dura aun,
gracias a Monty y Chato por acompañarme y aguantar este día de calor con migo, nos veremos en otra compartiendo como buenos amigos lo bueno y lo malo de la bici.
Y el recorrido y perfil como siempre.
Escribir comentario
Manolo Martos (viernes, 05 septiembre 2014 15:59)
Qué tal, Ybarra.
Viendo esta ruta me animo a pedirte consejo -¡y quién mejor que tú- ya que tengo un amigo muy interesado en subir a la Tetica sin tocar -o al menos evitándolo en lo posible- el asfalto. ¿Se puede? saliendo de Macael, Purchena, Serón... me da igual porque nos acercaríamos en coche hasta ahí. ¿Qué ruta propones? ¿Sabes de alguna así, subida a Wikiloc?
Y otra cosa: muy importante que recuerdes los sitios donde hay agua -como en el Reúl Alto- porque en fechas así resulta fundamental, y uno no está ya para hacer de mula de carga.
Saludos cadenciosos.
Manolo.
botasybici (viernes, 05 septiembre 2014 16:06)
Hola manolo, por supuesto que si, lo mejor desde macael y saliendo temprano, son tres horas desde Macael, y la vuelta la podíamos hacer por el barranco del infierno, que como estoy en paro me gustaría acompañaros, por el agua, hay pocos sitios y mas este año tan seco, pero hay... Espero noticias tuyas, un saludo.